La tortuga de agua es una de las mascotas más comunes dentro de los hogares familiares y ultimamente lo es aun más, pues los niños cada vez optan más por tener una tortuga como mascota en vez de otro tipo de animal. Muchos hogares incluso cuentan con más de una dentro de una pecera o en un terrario.
Son muchas las causas por las que la tortuga se ha convertido en una de las mascotas favoritas por la mayor parte de las familias, pero una de ellas, y quizá la más importante, sea que son mascotas fáciles de cuidar y no son consideradas para muchos como una gran carga de responsabilidad. Los perros y los gatos, por ejemplo, incluso muchos animales exóticos requieren una gran cantidad de cuidados, a diferencia de la tortuga de agua, la cual un niño puede cuidar muy facilmente si le enseñamos de la manera correcta.
Como he mencionado anteriormente, una tortuga requiere escasos cuidados, pero por muy mínimos que sean, los requiere. Por ello, voy a contaros cuales son estos cuidados básicos que necesita este animal marino, para que aprendáis vosotros y enseñéis a los niños. A lo mejor los Reyes Magos regalan una o varias tortuguitas por Navidad.
Para empezar, la pecera o terrario donde se aloje la tortuga debe tener una profundidad suficiente para que pueda nadar, pero además, no nos podemos olvidar de que las tortugas también necesitan su pequeño espacio para salir del agua y secarse. Este pequeño espacio terrestre debe estar colocado en un lado donde dé el sol, ya que las tortugas necesitan de este para estar saludables. En caso de que no encuentres un lugar donde pueda dar luz natural a la tortuga, puedes poner una lampara que simule la luz solar y apunte hacia ese pequeño terreno de tierra en el acuario.
Respecto al agua, tiene que estar lo más limpia posible y para ello debemos cambiar el agua al menos dos veces por semana y además, se recomienda que el acuario cuente con un filtro de agua para evitar que se ensucie demasiado. La temperatura del agua ha de ser media, ni muy caliente ni muy fría, y tampoco debemos tenerla en un lugar donde hayan corrientes de aire.
En cuanto al alimento de las tortugas, es muy fácil encontrarlo en las tiendas de animales y a precios muy económicos, pero si queremos variar la dieta de nuetro animalito siempre podemos proporcionarle larvas, grillos, vegetales, pescado crudo e incluso insectos pequeños. Esto sobre todo es importante, para todo aquel que tenga una tortuga acogida directamente de la tierra y no de una tienda de animales o criadero, pues al principio éstas rechazan la comida de las tiendas. Aun así, es recomendable seguir dándosela pero mezclada con esta serie de alimentos antes mencionados.
Las tortugas también pueden coger infinidad de enfermedades y muchas se deben al desconocimiento que hay acerca de la luz solar que necesitan o a una dieta inadecuada. Si tu acuario cuenta con más de una tortuga y una de ellas está enferma, debes separarla del resto durante un tiempo hasta ver que ésta se ha curado.
Los hongos son la enfermedad más comun en las tortugas, no es una enfermedad preocupante pero sí es necesario prevenirla antes de curarla. Para prevenirla debes echar 1/4 de una taza de sal cada 19 litros de agua, pero si la tortuga ya tiene hongos debes comprar un medicamento para hongos que puedes encontrar en cualquier tienda de animales.
Si la tortuga tiene el caparazon blando y los ojos hinchados es urgente acudir al veterinario porque es posible que estos síntomas no solo sean a causa de una mala dieta o poca exposición al sol. En caso de que la tortuga tenga alguna herida en la piel, también es recomendable acudir al veterinario para que nos de una crema que poner sobre la herida. En caso de presentar heridas, debe tenerse la tortuga dentro de casa para evitar que las moscas pongan larvas sobre éstas.
Después de estos cuidados básicos y consejos, algunos ya estaréis decididos a comprar una tortuga debido a la fácil responsabilidad que requiere. Para que os decidáis a comprarla o pedirla por reyes y encontréis la que más os gusta, os dejo aquí los tipos de tortugas que hay.
